Gran parte de la sociedad moderna se basa en las
leyes. Pero éstas se basan en perspectivas lejanas a lo espiritual. Están
basadas en el miedo y la desconfianza hacia otros seres humanos y hacia uno
mismo.
No se trata de imponer ninguna voluntad para eliminar
las leyes. Sería algo disparatado.
Las leyes se crean porque los humanos tienen la
necesidad de controlar. Ahí es donde está el
miedo y el control. No creen en la bondad y la integridad de las
personas. De ahí que buscan la manera de eliminar la maldad que perciben como
“raíz” de la existencia humana.
Aunque sabemos que es imposible eliminar las leyes en
estos momentos, si lo hicieran, la humanidad volvería a sentirse liberada.
Recordarían quiénes son y de dónde vienen.
Los cimientos de la humanidad se basan en el amor, el
cual no requiere de leyes para regular el comportamiento humano. Sólo el miedo
y la desconfianza requieren de leyes.
La integridad no tiene nada que ver con adherirse a
los sistemas legales, sino con ser honestos con uno mismo. A partir de ello, no
se necesitarían leyes ni restricciones legales ya que estarías actuando desde
la mayor integridad: desde el amor.
El punto central es que el amor se impone a la ley. El
amor asegura que serás recompensado adecuadamente por la Ley universal de la
Atracción, por un universo que no reconoce otra ley más que la suya.
*Busca. Infórmate. Cuestiona. Comprende.*
“La Verdad Es, Independientemente de lo que te Hayan
Enseñado a Creer”.
Gracias al
Espíritu y a John Cali por sus
enseñanzas.
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