¿Cuánto trabajo nos cuesta aceptar que las cosas ya son diferentes? Nos guste o no, se transforma. Y con estas transformaciones, deberíamos cambiar para entender la nueva dinámica de los tiempos.
No sigas aferrado a lo que ya no te sirve. Lo que alguna vez funcionó, es probable que no te sirva hoy en día. Hablamos de viejas costumbres, de sistemas de creencias que en lugar de ayudarte, hoy en día representan tremendos obstáculos en tu camino.
No sufras más. Abre tu corazón a las nuevas posibilidades. Cambia. Sabemos que el proceso no es fácil. Por esa razón, compartimos el siguiente artículo de la autora Guillan McBeth-Louthan, reconocida mujer en temas de Metafísica y Canalización.
No construyas en terrenos áridos del pasado, no vas a producir ningún fruto. Siembra en terrenos fértiles del presente para que produzcas los frutos más hermosos para tu vida.
“Conforme pasan los días del año, el peso de lo que hacemos o no, parece aumentar. Se hace más denso y sólido que cualquier otra cosa de nuestro pasado. Se pega en los pies como cemento, creando un sentimiento de estar hundidos e inmóviles.
Poco a poco concretamos nuestras intenciones, nuestra alma nos da luz verde, pero nuestro diminuto ser humano se para frente a nosotros de manera firme y nos detiene. Nos hundimos cada vez más en la desesperación y el deterioro, conforme nos castigamos con latigazos. Gastamos demasiada energía discrepando con nosotros mismos, con nuestros ‘debiéramos’ o ‘pudiéramos’. Tratamos de domesticar lo que parece ser la bestia salvaje de la indecisión, el monstruo que nos reprime, siempre bloqueando nuestro camino a la felicidad, al amor y a la abundancia. Con la cantidad de energía que gastamos discutiendo con nosotros mismos pudiéramos construir edificios, centros comerciales, esculpir obeliscos y quizá hasta un par de pirámides.
Sin embargo, nos mantenemos quietos mientras nos hundimos más en las arenas de la inmovilidad, en el lodazal de la inactividad. Continuamente saboteamos nuestros sueños, nuestros deseos y nuestro futuro, en un esfuerzo por salvar los bosques de nuestro antiguo ser. Nos aferramos a lo que alguna vez nos sirvió. Entumecemos nuestra habilidad para movernos hacia lo nuevo, hacia nuestros sueños más brillantes. ¿Por qué tememos avanzar? ¿Por qué nos da miedo actuar?
Todo el mundo en el planeta está sintiendo la transformación. Sabemos que no nos podemos quedar en nuestra zona de confort, en la nulidad, en el vacío. Sabemos que es momento de levantarnos de las bancas de lo antiguo, de nuestro ser en el pasado y avanzar al campo de juego de lo nuevo, del ahora. Sin embargo, cuando nos toca el turno de batear, nos congelamos de miedo. Mantenemos congeladas todas las posibilidades, las nuevas entradas a las maravillas del futuro. Acepta el caramelo de la conciencia. Como Frosty, el muñeco de nieve que espera temerosamente la primavera, sabiendo que el cambio de estación es inevitable. Frosty podría adoptar una actitud que facilitara el cambio, pero no lo hace.
El diseño de la humanidad está destinado a cambiar. Como el agua, todos tenemos el potencial de experimentar muchas formas. Tenemos nuestros días líquidos, sólidos o vaporosos. Podemos ser un iceberg, una corriente, una nube, una gota de lluvia, neblina o un océano. Somos 90% agua. Somos como la marea, subimos y bajamos con cada nuevo pensamiento, cada puesta de sol, cada tormenta y cada eclipse.
Sin embargo, cada año, anhelamos mantener esa pasividad, mantenernos atorados, en lo mismo, en nuestra zona de confort. La única constancia que tenemos es el hecho de que siempre nos transformamos y cambiamos.
Comprende que la inquietud y añoranza que está en ti, son indicaciones y tips del Universo(llámese Dios). Gentiles recordatorios nos dicen que es momento de desprendernos de lo antiguo, de ir y cambiar. La resistencia no es algo fértil. Nada puede crecer en ti mientras te resistas. Acepta la palabra ‘acción’(Yo actúo). No avanzas a un futuro que sea ‘menor a’. El cambio siempre va de la mano con la energía de ‘más’. Nunca podrás ser menos de lo que eres, pero siempre podrás ser más.
*Busca. Infórmate. Cuestiona. Comprende.*
“La Verdad Es, Independientemente de lo que te Hayan Enseñado a Creer”.
Gracias al Guillian McBeth-Louthan por sus enseñanzas
www.thequantumawakening.com
