3 de abril de 2020

(Abril 2020)

El tema hoy día es…. El que ya conoces: ¡¡¡la crisis del papel higiénico!!! 😉

Hoy te invito a que no te preocupes por lo que ocasionó este momento, a que no caigas en el sentimiento de miedo o tanto peor, de pánico porque ves que el supermercado está vacío. Más pronto de lo que imaginas volverán a resurtirlo y todo regresará a la normalidad a la que estás acostumbrado. 

Cada uno en su realidad y circunstancia retomará su vida y confío en que después de esta prueba a la que el planeta se está enfrentando la humanidad valorará más su vida, al planeta, su familia, sus amigos, su trabajo e incluso empezará a darse cuenta de cosas en las que antes no ponía atención o notará la presencia de personas que en el pasado eran transparentes ante sus ojos. 

Pero el verdadero tema es que la humanidad se está dando cuenta de que más allá de su vida ajetreada y llena de actividades, de mil y un cosas que hace durante la semana, ahí están no sólo su familia cercana y amigos, sino sus vecinos, sus compañeros de trabajo, las personas que les otorgan diversos servicios, como el de limpia, la energía eléctrica, el agua. El carpintero, panadero, plomero, pintor, jardinero, carnicero, chofer, el aseo, la vigilancia… y todos somos uno. Estamos juntos… y siempre lo hemos estado, pero lo olvidamos.

Como siempre ocurre, también hay cosas positivas que se vislumbran en medio de este asunto. Algo maravilloso que está sucediendo ahora que piden que “se evite el contacto social” y permanezcas en tu casa lo más posible y sólo salgas cuando es indispensable, es que ahora la gente ha mirado a su alrededor y se da cuenta que puede ser útil para otros. Por ejemplo, para ayudar con la compra de víveres o medicamentos para alguien que viva en su calle o edificio y que por alguna razón está imposibilitado para poder hacerlo.   

Así que, es cierto, hay que tomar precauciones sanitarias, hay que seguir las sugerencias que se nos hacen para evitar propagación, pero NUNCA permitir que el miedo se apodere de nosotros y que nuestro cuerpo resienta lo que el miedo provoca en él; que nunca será tan fuerte como lo que otro tipo de agentes externos pueden llegar a provocar. Recuerda que tus pensamientos son tu arma más poderosa, que tú eres un creador y creas TU realidad. Qué esta sea de felicidad, salud y bienestar.

Y sí, estamos viviendo un momento inédito. TODO el planeta, los 5 continentes, se encuentra en estas fechas en aislamiento social voluntario…. Confinados en sus casas… Y lo inédito es que no es por razón de una guerra, sino por un virus. De los que, por cierto, existen millones en el planeta (y dentro de nuestro cuerpo).

Estamos en un tiempo en que el G20 (los países más poderosos del planeta) se reunieron vía teleconferencia para acordar cómo enfrentar y apoyarse para salir avante de esta situación. El G20 se reunió ¡vía teleconferencia! y no faltó un solo jefe de estado. Y se lograron acuerdos. Que cada año que se reúnen -en vivo- usualmente o no asisten todos o no logran acuerdos. Así de inéditos son estos tiempos. 

Cuando esto termine, confío que las cosas ya no sean iguales en el planeta. Me parece que este momento en el que nos encontramos, servirá para que la humanidad se termine de dar cuenta de muchas cosas, pues ahora están quedando expuestas. Por supuesto esta situación tendrá repercusiones fuertes para todos los países, sean desarrollados o no. Repercusiones en todas las esferas sociales, en todos los sectores y ámbitos. Es momento de aprovechar la enseñanza que esta experiencia aporte.

Mi madre siempre nos decía una frase a mis hermanos y a mí cuando llegaba por la mañana a despertarnos, cada vez que había algún problema, nos veía preocupados o enfermos y te la comparto, con un abrazo fraterno, pues desde el otro lado del velo ella me la sigue repitiendo: ¡ARRIBA CORAZONES!

Te agradezco que hayas visitado este espacio y te mando un saludo Desde Aquí...
Silvia Limón