Guillan MacBeth-Louthan comenta la importancia de los eclipses del 26 de junio y del 11 de julio, con respecto a las nuevas oportunidades que surgirán si estamos listos para recibirlas. El texto original se titula “Fighting Them Their Daily Dust Devils” (algo así como“Combatiendo a los Demonios Diarios”).
Conforme la energía de Géminis pelea consigo misma, todos nos sentimos atraídos en cada dirección. Como si estuviéramos en un remolino, nuestros pensamientos se reúnen con nuestros demonios diarios, y nos distraen de lo que en verdad es importante. Nos piden que le extendamos una mano en situaciones que preferiríamos no enfrentar. La luz y la obscuridad de los gemelos astrológicos exigen que hagamos las paces con los dragones internos y externos. Cada uno es un poco más sensitivo, un poco más gruñón, un poco más aturdido. Buscamos consejos en nuestra alma y en nuestro ser, y lo único que vemos es neblina. Nuestros pensamientos cambian como el clima en luna llena.
El 26 de junio presenta un eclipse en la vibración del “8” (Como es Arriba es Abajo y Adentro). Esta configuración abre un portal infinito que te acompaña para superar limitaciones anteriores. Es un número que significa ir más allá de lo que consideras tus límites normales. Te pide que emprendas el vuelo hacia la luna y que ha tu regreso hagas una parada en la Vía Láctea. Es energía atómica puramente espiritual, una fuente de poder. Es éxito, prosperidad y grandes negocios con el sabor extra de las bendiciones universales. Finalmente se trata de recordar tu herencia divina, prometida por tu Sagrado Creador. Implica superar las limitaciones terrenales y avanzar hacia un lugar de opulencia y recompensas.
El segundo eclipse, que es solar, del 11 de julio, trata de la esencia del “11” en toda su gloria. Cuando las fuerzas del once se han activado completamente, tienen el poder de cambiar la historia. La puerta de todo lo que es el “11”, es montar en la cresta de la manifestación instantánea. Deja ir las manifestaciones hechas por el hombre y manifiesta las creaciones crísticas. Se abrirán algunas puertas y se cerrarán otras, y tú estarás en medio. Serán creaciones conscientes con un intervalo de pensamiento de 11 segundos.
El once nos enseña que cada problema se presenta como una oportunidad divina para aprender. Nos muestra cómo ver más allá de lo que aparece cada día y resulta aburrido. Pone a prueba nuestra fe y nuestro sistema de creencias. Nos fuerza a escuchar a esa callada voz interior, del testigo silencioso. Nos recuerda que somos seres vastos y que hemos venido a la Tierra para ayudar con el proceso de despertar y el de sanación, comenzando por nosotros mismos. Te pide que ubiques la luz y la compartas con todos. El once es nuestro mejor Amigo y nuestro mejor Maestro.
Todo lo anterior, en preparación al eclipse del 21-12-2012, que nos llena a una nueva fábrica del tiempo, escrito y no escrito Entre el 21-12-2010 y el 21-12-2012, practicaremos dentro de nuestra propias reflexiones. En el 2012, entraremos de manera colectiva al Espejo Solar, un pasillo a través del tiempo hacia un lugar que espera nuestra llegada. Todo lo que suceda entre hoy y ese momento, simplemente es práctica.
En el lugar de los Espejos, no hay bueno o malo, correcto o incorrecto. Sólo hay reflexión. Dentro de la reflexión, ahí habita una espada de luz, cortando lo que nos ha envenenado, permitiendo que comience la sanación; deshaciendo la ilusión de la causa y del efecto. Todos los trucos que se han presentado a lo largo del tiempo, saldrán a la luz y se exhibirán ante la brillante luz solar, por lo tanto, creando nuevas líneas de tiempo que conducirán a la Tierra a un lugar en donde no ha estado antes.
La bifurcación en el camino hace que la humanidad vaya por un nuevo rumbo. Un lugar donde las brújulas ya no funcionan y el holograma se transforma para adaptarse a nuestras necesidades. ¿Cambias el tiempo o el tiempo te cambia? La respuesta está por verse.
Ver hacia el futuro no es algo apto para los débiles de corazón. Conforme uno camina por las puertas del tiempo, aparecen trampas. Pequeños hoyos negros hacia otros universos y lugares en un tiempo paralelo, pueden llevarnos de ida y regreso, creando un efecto de mareo. Las puertas del tiempo se abren y se cierran más rápido que un abrir y cerrar de ojos. El tiempo y la verdad son cuestiones individuales, y no presentan un punto de vista singular o un resultado particular. Todos los textos antiguos y los textos que vendrán, se leen desde una perspectiva personal y se “digieren” como lo hacemos con nuestra comida favorita. Cada bocado se ve y se siente de manera individual, así que por lo mismo, crean una multitud de interpretaciones y resultados.
*Busca. Infórmate. Cuestiona. Comprende.*
“La Verdad Es, Independientemente de lo que te Hayan Enseñado a Creer”.
Gracias a los Pleyadianos y Guillian McBeth-Louthan por sus enseñanzas
http://www.thequantumawakening.com/
