“¡Qué difícil es perdonar!”, dicen muchas personas. Pero si acumulamos odios y rencores del pasado, simplemente seguimos envenenando nuestras vidas.
El Espíritu –a través de John Cali- tiene un breve, pero importante mensaje sobre el amor y el odio.
Muchos de ustedes han pasado por experiencias que les han generado sentimientos de odio. ¿Sientes resentimiento por lo que te hizo algún familiar? ¿Algún compañero de oficina no te cae bien? ¿No te gusta tu trabajo? ¿Sigues resintiendo acontecimientos del pasado? ¿Sientes rencor por errores en tu vida?
No olvides que esas experiencias simplemente son parte de tu crecimiento como seres humanos.
Pero lo que pasa es que ustedes crean problemas y barreras cuando insisten en aferrarse a esos recuerdos de dolor y angustia. De hecho, vemos con frecuencia que construyen monumentos a su dolor y sufrimiento. ¿Cuántos monumentos han construido para recordar guerras?
Respetamos su deseo natural por honrar a los que han muerto en las peleas humanas, pero no creemos que sea bueno que conserven esos recuerdos de sufrimiento y dolor en su mente o en su conciencia. Si ustedes no olvidan esos acontecimientos, estarán condenados a revivir aquello que deberían olvidar. La única manera de crear paz es deshacerse del odio que pudiera existir en sus corazones, sin importar lo que hubiera sucedido en el pasado. El odio genera odio y el amor genera amor.
Cada sentimiento de odio contribuye a incrementar las heridas del mundo. Cada sentimiento de amor contribuye a la sanación del mundo.
Vive sin odios. Vive con amor. Y entonces podrás crear el mundo que has soñado.
*Busca. Infórmate. Cuestiona. Comprende.*
“La Verdad Es, Independientemente de lo que te Hayan Enseñado a Creer”.
Gracias al Espíritu y a John Cali por sus enseñanzas.
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